El cristianismo pierde fieles y hay una explicación:
Quien está fuera no ve la seriedad de la religión.
Los que están fuera ven un millón de denominaciones,
Hay millones de sentimientos diferentes en los corazones.
Incluso dentro de la misma rama,
No todos están en el mismo espíritu de adoración.
Entre los evangélicos, no es posible ver el espíritu de unión,
Las iglesias parecen rivales y viven en peleas y discusiones.
Los líderes más conocidos libran grandes batallas,
Discuten, pelean, insultan y luego no se aprovecha nada.
Sin conocimiento, los fieles los siguen ciegamente,
Piensan que estar peleando significa ser un buen creyente.
Los seguidores están ciegos porque no buscan la verdad,
La mayoría nunca ha leído la Biblia ni la ha estudiado con seriedad.
Es mucho más fácil creer en las palabras que dice el predicador,
Para ellos no hay necesidad de leer lo que hizo el Señor.
Debido a esta ignorancia, el cristianismo cae en descrédito,
Quien está fuera no quiere tomarlo en serio.
No pueden creer que en este medio haya salvación,
Porque no hay libertad de vida, hay ignorancia y alienación.
Este poema es parte del libro Poesía Cristiana volumen VII.
Vea el libro:
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