¿Dónde están los creyentes como los bereanos?
¿Dónde están aquellos que prueban lo que están predicando?
¿Dónde están los que leen la palabra del Señor?
¿Dónde están los que solo aceptan lo que Dios habló?
Los cristianos teológicos están desapareciendo,
Y la verdadera iglesia está muriendo.
La iglesia que se preocupaba por el Señor,
Está siendo sustituida por lo que el ser humano inventó.
La Biblia ya no se toma en consideración,
Vale más la palabra del hermano “lleno de la unción”.
Las palabras de los profetas fueron “ajustadas”,
¡Las profecías y enseñanzas ya no valen nada!
El descrédito de la Palabra es culpa de los ciegos seguidores,
Personas que no leen y solo creen en los pastores.
Son falsos “sabios” cegados por su propia doctrina,
Ninguno de ellos tiene la verdadera Palabra de vida.
La verdadera Palabra es la cruz de Cristo, la gracia y la salvación,
La maravillosa gracia de Dios que nos lleva a la reconciliación.
La verdadera Palabra es el arrepentimiento verdadero y sincero,
Andar temiendo a Dios y siendo siempre correcto.
La verdadera Palabra es oír y todo analizar,
Investigando si en esa palabra podemos confiar.
Solo así, estaremos actuando de manera correcta,
Probando si toda predicación está o no cierta.
Este poema es parte del libro Poesía Cristiana volumen VII.
Vea el libro:

No hay comentarios:
Publicar un comentario