El Evangelio de la Gracia de Dios ya no tiene valor,
A algunos no les importa la cruz del Señor.
Muchos están obstinados por conquistar,
El sacrificio hecho por Jesús, no quieren recordar.
Muchos líderes insisten en predicar la “nueva verdad”,
Dicen que Dios creó a todos para tener prosperidad.
Palabras como gracia y salvación no entran en la predicación,
Solo se oye hablar de realizar los deseos del corazón.
Lo peor es que el deseo del corazón no es adorar y alabar,
El mayor deseo del corazón es todo conquistar.
Muchos tienen el deseo de humillar a sus enemigos,
Quieren esto para exaltarse y parecer magníficos.
Con estas prácticas, las personas hacen todo equivocado,
Van a la iglesia, pero hacen lo contrario de lo que fue enseñado.
El Señor Jesús enseñó que se necesita humildad,
Y que la exaltación depende de Dios y de su voluntad.
Jesús mostró cuál es la mayor fortuna que se puede tener,
El tesoro debe estar donde la polilla no puede corroer.
La mayor prosperidad es la salvación del Señor,
La mayor riqueza es estar al lado del Salvador.
Este poema es parte del libro Poesía Cristiana volumen VII.
Vea el libro:
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