Todos los hombres son pecadores,
Están entregados a sus pasiones.
Viven una vida sin temores.
Están sumergidos en muchos dolores.
Cada uno anda hacia un lado,
Diciendo: Eso es correcto,
Lo que estoy haciendo no es pecado,
Hago eso y no hay nada incorrecto.
De esa manera, muchos están viviendo,
Muchos de ellos, en el pecado, están muriendo.
No hay nadie que se pueda salvar,
Todos están viviendo para pecar.
Ellos no admiten que están pecando,
Cometen toda clase de errores,
Y creen que el bien se está ejecutando.
En verdad, ellos se están condenando.
Sus vidas necesitan cambiar,
No solamente en la manera de se comportar.
Ellos necesitan conocer la salvación,
Necesitan tener a Jesús en el corazón.
Solamente el Señor puede perdonar a todos,
Solamente Dios tiene la gracia para dar a todos.
Los pecados, el Señor borrará,
Un nuevo tiempo, el pecador vivirá.
Este poema es parte del libro Poesía Cristiana volumen III.